Pablo Castro “El Bombero”, heraldo de la 14ª Edición del Campano Soriano

Pablo Castro “El Bombero”, heraldo de la 14ª Edición del Campano Soriano

Publicado por «El Campano Soriano» el 3 marzo, 2016

Con la desveda de la pesca de truchas en Castilla y León a la vuelta de la esquina (domingo 3 de abril de 2016) y, como cada temporada por estas fechas, el Club Deportivo de Pesca «Campano Soriano» trabaja en la preparación de una nueva campaña de su singular campeonato, la que será la 14ª Edición del Campano Soriano (2016). Como viene ocurriendo en años precedentes, el club desvelará las novedades y ofrecerá todos los detalles de la nueva edición en la presentación oficial ante los medios de comunicación que tendrá lugar el martes 15 de marzo de 2016 a las 17:00 horas, en el Salón Gerardo Diego del Círculo Amistad Numancia de la capital soriana, y a la que asistirá, entre diversas personalidades, el nuevo heraldo de esta edición, Pablo Castro Pinos.
Pablo Castro Pinos “El Bombero” es, sin duda alguna, uno de los mejores deportistas de la caña que ha dado nuestro país. Ostenta innumerables títulos en su vitrina, entre los que destaca el último conseguido y que le acredita como campeón del mundo de salmónidos mosca con el equipo español en el mundial disputado el pasado año en Serbia, título que la selección nacional logró por primera vez.
Pablo Castro debe su apodo a su profesión de bombero, ya que trabaja en el Ayuntamiento de León desde hace años en esta arriesgada, valorada y humanitaria labor. Es también campeón de Europa individual y subcampeón en la movilidad del sedal pesado, habiendo alcanzado dos veces el bronce con España en los campeonatos del mundo, contando además en su palmarés con 5 Campeonatos Autonómicos, 4 Semanas Internacionales de la Trucha de León, 1 Campeonato de España individual y 2 Campeonatos nacionales por clubes.
Asimismo, nuestro Heraldo en la edición del 2016, es un consumado maestro en el montaje de moscas artificiales para la pesca, tiene 47 años de edad y es natural de la localidad de Villoria de Órbigo, en León, un escenario mítico donde las truchas enseñaron a este avezado cañista internacional parte de lo que sabe.